El evento estuvo encabezado por la Subsecretaria de Relaciones Exteriores, Gloria De la Fuente, así como por el Presidente del Directorio del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, Patricio Zapata.
En su intervención, la Subsecretaria De la Fuente destacó la publicación como "una iniciativa que se inscribe en el camino de la memoria. En ella se entrelazan el dolor y la esperanza de quienes sufrieron el destierro durante la dictadura cívico-militar”. Subrayó la importancia que para la Cancillería reviste mantener la vinculación con la comunidad de chilenas y chilenos en el exterior.
Contó además con exposiciones de los autores de cuatro de los 52 relatos que conforman el texto. Lidia Casas, Daniella Jofré, Francisco Nómez y Marcela Ríos, relataron la forma en cómo enfrentaron los años de destierro, las secuelas de haber vivido en el exilio, el aprendizaje, la disyuntiva identitaria que se presenta cuando se radica en el exterior, el sentido de pertenencia así como la solidaridad del pueblo canadiense; lo anterior, desde la mirada del propio exiliado así como sus descendientes: hijos y nietos.
Entre anécdotas sobre el arribo a un lugar ajeno, el proceso de inserción, la añoranza por el país y la familia que quedó atrás, el proceso de adaptación y reinvención en el nuevo lugar de residencia, los cuatro exponentes coincidieron en la importancia de seguir manteniendo la memoria viva, a través de iniciativas como el texto presentado.
El acto concluyó con la entrega de un ejemplar del texto al acervo del Museo de la Memoria y de los Derechos Humanos en Santiago.
Fotografías: Leticia Bastías